Me lo escribió una amiga en una postal hace años. Es una cita de Paulo Coelho:
"El cruce de caminos es un lugar sagrado.
Allí el peregrino ha de tomar una decisión.
Por eso, los dioses suelen dormir y comer en los cruces.
Donde las carreteras se cruzan,
se concentran dos grandes energías,
el camino que será escogido
y el camino que será abandonado.
Ambos se transforman
en un solo camino
pero simplemente por un periodo pequeño de tiempo.
El peregrino puede descansar,
dormir un poco,
incluso consultar a los dioses que viven en las cruces,
pero nadie puede quedarse allí para siempre.
Una vez hecha la elección,
es preciso seguir adelante,
sin pensar en el camino que se dejó de recorrer.
O el cruce se transforma en una maldición".
"Hécate era una deidad de la noche, la encrucijada, la vida y la muerte. Era llamada la más amigable Reina del mundo de los espíritus. La Diosa Hécate está relacionada a la sanación, profecías, visiones, magia en la Luna Nueva, encantamientos para deshacerse del mal, la riqueza, la victoria, la sabiduría, la transformación, purificación, la renovación y la regeneración."
"Para hacer un ritual de Hécate usted necesita:
- Su Athame (Daga ceremonial)
- Una olla o caldero
- Una Manzana
- Una tela negra y
- Sal marina
Procedimiento:- Una olla o caldero
- Una Manzana
- Una tela negra y
- Sal marina
Ponga la manzana en la olla y cubra con la tela negra.
Abra su círculo como de costumbre y con su bastón en la mano, toque la olla durante cinco veces y diga:
“Hécate sabio, le pido su bendición.
Levanto el velo para poder saludar a mis ayudantes espirituales,
Antiguos amigos de otras vidas, y de los que son nuevos.
Que únicamente los que me deseen el bien entren en este lugar sagrado.
Destapo la olla y coloco una ofrenda en tu altar.
Hécate, su caldero mágico es la fuente de la muerte y el renacimiento,
Una experiencia por la cual cada uno de nosotros pasa en repetidas ocasiones.
Yo no temo, porque sé de su delicadeza.
Aquí está tu símbolo de la vida en la muerte”.
Levanto el velo para poder saludar a mis ayudantes espirituales,
Antiguos amigos de otras vidas, y de los que son nuevos.
Que únicamente los que me deseen el bien entren en este lugar sagrado.
Destapo la olla y coloco una ofrenda en tu altar.
Hécate, su caldero mágico es la fuente de la muerte y el renacimiento,
Una experiencia por la cual cada uno de nosotros pasa en repetidas ocasiones.
Yo no temo, porque sé de su delicadeza.
Aquí está tu símbolo de la vida en la muerte”.
Contemple el pentagrama revelado en las dos mitades de la manzana en la olla y tápelo de nuevo con su tela negra.
Finalmente, ponga una pizca de sal en la lengua y diga:
“Soy mortal, pero ahora soy inmortal.
No hay fin de la vida, sólo un nuevo comienzo.
Yo camino al lado de la Diosa en muchas de sus formas.
Por lo tanto no hay nada que temer.
Abro mi mente, mi corazón y mi alma.
A los profundos misterios de la caldera de Hécate”
“Soy mortal, pero ahora soy inmortal.
No hay fin de la vida, sólo un nuevo comienzo.
Yo camino al lado de la Diosa en muchas de sus formas.
Por lo tanto no hay nada que temer.
Abro mi mente, mi corazón y mi alma.
A los profundos misterios de la caldera de Hécate”
Este alerta a nuevos guías y maestros que puedan surgir para ayudarle". (Fuente)
Como siempre, adápatalo a tí,
o símplemente medita o piensa relajadamente
sobre el significado de los caminos que se presentan ante tí,
sabiendo que no importa el camino que tomes
sino el viaje que estás realizando
desde el corazón.
La imagen de Hécate con el perro de tres cabezas sale en las cartas de la diosa con una preciosa meditación.
"Según la mitología Hécate, la noche era su representante, y las tres caras de la luna también le pertenecían. Cada una de ellas representaba a esta mujer en sus diferentes formas, la anciana Selene en el cielo, la experta cazadora Artemis en la tierra y la doncella Perséfone en el inframundo. Es por esta multiplicidad de personalidades que Hécate se asocia a las encrucijadas, aquellas en las que hay tres caminos. De hecho sus templos y rituales eran llevados a cabo en estos lugares". Fuente
Una poesía preciosa de María Sangüesa en su blog El Vuelo de Hécate:
"A TI, HÉCATE
A ti, que guardas todos los caminos,
desde la altiva luz a las tinieblas,
desde el más suave de los tiernos tallos
hasta la más ardiente de las rocas.
A ti, que siendo guía entre las sombras,
sabes romper en flores el invierno.
Y guardando la llave de lo oculto
en ti contienes todas las respuestas.
A ti, que conoces los limes de la selva
y la más alta cumbre de lo hermoso
o, de lo más oscuro, la más oculta puerta.
A ti, la más alada de las diosas,
te imploro que ilumines mi destino:
que sea flor y hoja, agua, fuego y roca... "
Que vuestros caminos sigan cruzando senderos, montañas y ríos.
Que cada avance os traiga bendiciones
Que la vista atrás sea para crecer ver lo bueno que habeis hecho
Que siempre sigais la luz que aparece en vuestro recorrido