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Hadas de las flores por colores

Hadas de la alegría
Flores amarillas, como prímulas, ranúnculos y narcisos

Hadas de la pureza y la esperanza
Flores blancas, como las margaritas, lirios del valle y jazmines

Hadas de energía
Flores rojas, como amapolas, rosas y claveles

Hadas de la curación
Flores azules, como campanillas y nomeolvides


Hadas del amor y la belleza
Flores violetas, como lavanda, violetas y dedaleras

Si no crees en los seres féericos puedes creer en las energías sutíles y dejarte llevar por la imaginación. Puedes sentir que te acompañan, o que hacen su trabajo haciendo crecer las plantas y cuidando de la vegetación en general. Para atraer esas energías, aunque sea en tu mente, puedes poner figuritas de hadas en alguna maceta que cuides con esmero o alguna imagen de éstas por tu casa.

Fuente: Magia natural nº5


En de dioses y hadas nos cuentan:
"El mundo de las flores está directamente relacionado con la vibración etérea de las hadas en ese espacio energético sutil que llamamos luz y penetra nuestros sentidos a través del aroma y el color. Por ello es seguro que habrá hadas en jardines con romero y eneldo.




Las hadas viven y duermen, se visten y actúan según la flor que han elegido y crecen según ésta crece. Son tanto sus jardineras como su espíritu y se encargan de dar agua, luz, cuidar de sus pétalos, hojas y tallos, manteniéndolas sanas y fuertes. Cada flor tiene una canción especial que el hada canta para mantener viva y fuerte a su flor. Es parte de las vibraciones amorosas que animan a la planta a crecer.



Se dice que para ver a las hadas se debe comer en primavera un manojo de prímulas, que son flores que hacen visible lo invisible. Es posible incluso que se pueda hallar el camino de las hadas y hallar los tesoros que ellas guardan."

Ranking de correspondencia de hadas con flores concretas: dos direcciones que ponen lo mismo.