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hooponopono

He encontrado esta meditación que nos remite a un tipo de sanación propia de Hawaii. 
Se basa en quererse a sí mismo y en limpiar con amor y perdón faltas de uno mismo o del linaje.

Os dejo el video colgado en u-tube por Vivi Cervera el 25 de Agosto de 2008 con Música de fondo: "Nocturno de Secret Garden".



Aunque te parezca una cursilería se cura mucho diciendo te amo: a tí mismo, a personas, a situaciones.
Date un pequeño momento para decírtelo a tí y a las personas que han pasado por tu vida.


Valle Kalalau desde el parque estatal Koke'e, donde Nana Veary enseñaba hoʻoponopono


"Hoʻoponopono (ho-o-pono-pono) es una antigua práctica hawaiana basada de reconciliación y perdón.

Existen otras prácticas de perdón similares en islas de Oceanía como SamoaTahití y Nueva Zelanda. Tradicionalmente, el ho'oponopono es practicado por sacerdotes de curación o "kahuna au" entre los miembros de la familia de una persona que está mal físicamente. Las versiones modernas se llevan a cabo dentro de la familia por el miembro de más edad.

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Un lei hecho con la fruta del pandanus.
 En la tradición de kahuna Makaweliweli de Molokaʻ se entregaba un lei de pandanus al completar hoʻoponopono

Es una práctica que se ha extendido a otros países. Entre ellos México, donde debido al tipo de cultura y por sus tradiciones, los pensamientos de las personas tienden a estar inbuídos de memorias dolorosas; memorias de personas, lugares, cosas. Por eso, esta práctica se hace necesaria en la meditación para modificar nuestros pensamientos y que estos sean positivos y sanadores".
Información e imágenes de wikipedia

En Amarse a uno mismo nos dan las claves que reproduzco aquí:

  • Cada vez que sucede algo que nos desagrada, o que alguien tiene una actitud que nos gusta, en vez de tratar de cambiar las cosas “allí afuera” podemos pedir, como en una oración, que “por favor sea sanada la parte de mi mente que creó este problema (o el conflicto o la actitud de la otra persona, etc.)”.
  • También podemos decir mentalmente: “Lo siento, Te amo” (podemos agregar también “Por favor perdóname, y Gracias”), dirigiéndonos a la Divinidad. 
  • La técnica debe aplicarse con una actitud de serena alegría, no con culpa y remordimientos. 
  •  Y por último, pero tal vez lo más importante, debemos haber comenzado a intuir, a través de la experiencia, que en realidad somos nosotros los que creamos o atraemos los problemas. Si seguimos pensando que somos “las víctimas” de los demás o de las circunstancias externas, nada puede cambiar aunque practiquemos Ho’oponopono.